Shmnsm

sexto viaje

15 minutos

Varios destinos

8 - encontrar a mi maestro y preguntarle si hay riesgos y como evitarlos riesgos en la non-ordinary-reallity (!)

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1-Descubrir quien era la presencia que me persiguí hasta la membrana

2-Visitar a la queens gambit, para conocer su nombre y al ojo verde junto a ella.

3-Visitar las montanhas del paisaje dentro del reloj de arena.

4-Visitar a los sujetos del disco luminoso.

5-Explorar el arbol y sus venas

6-Visitar al leopardo y sus estepas.

7-Ir hacia la izquerda, sobre mi hombro para explorar el area de luz y la presencia (mono-jaguar anaranjado) que sentí el primer viaje.

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Carpa, portal, sendero y liuego asciendo (mi yo coyote intentó irse al sendero del plata luego de la piedra de la muaca de la muerte, lo llamé y regresó inmediatamente). Choco con my espalda y nuca contra el vinilo. Me veo desde el otro lado, desnuso. Con un poco de dificultad logro vlterame para deslizarme hast ael orificio en el vinilo. Acceso. Floto.

Siento el humo-arena y la cercania de la luz-desierto. Me dirijo haciia arriba-a-ala-derecha. Agradezco a la malefica y al dragon de humo. Pasó por el verdugo, bastate alejado de él que parece ocupado en su tarima de madera, agradezco. Pivoteo en la parte superior del reloj de arena y vuelo por el tunel-tiempo hacia encontrar a mi maestro. En el tunel observo el disco-tarima con sus ocupantes pasar debajo de mi (como en sentido contrario, pero quiza sea un effecto de mi velocidad, quizá la tarima está quieta en medio del tunel-tiempo. Lllego al anillo de sombras y seres de color araranjado que resaltan como llamas de fuego o multiples layes bailando. Siento la precencia de mi maestro, que ahora cubre todo la extension superio del anillo de seres-de-sombra-fuego. Con sus rasgos faciales redondeados por la proyection reconozco que es él. No recuerdo su nombre. Saludos y le agradezco por su tiempo. Luego le pregunto como si hay riesgos en los viajes al la non-oridnary-reality y como evitarlos.

Inmediatamente siento que me absorve en su boca, manteniendome en su bocanada. No sucede nada. El espacio es obscuro y silencioso. Luego, desciendo suavemente sobre la calavera de un toro (seca en medio de un desierto rojizo). Mi coyote se echa a correr conmigo. De los penhascos arcillosos detras de mí veo bajer corriendo una figura de humo negro en plena luz de sol. Se trata de un cuerpo antropomorfo con cabeza de toro. Una especie de minotauro muscoloso. Nos corre. Miró a mi coyote correr junto a mi sin estar asustado. Alli decido no correr más. Detenido me volteo hacia el minotauro de humo quien tambien se detiene. Pienso si esté será el significado de la respuesta. Como sea, decido correr hacia el minotauro. A toda velocia mi coyete se une a mí en esta cacería. A los pocos metros de alcanzar al minotauro este sube al penhasco arcilloso desde el cual nos contempla. Evaluo subir al penhazco pewro me siento en desventaja. Al mirar alrededor veo un minotauro de humo en cada penhazco de la circurfencia que rodea al descierto. Entonces decido caminar junto al penhazco, montanha arriba, dando mi espalda al minotauro. Se que mi coyote me alarmaría si pasara algo. El coyote y yo entonces nos retiramos del anfitetrao de los minotauros sin mirar atras.

Aparezco nuevamente debajao de la proyecion de mi maesto. Le agradezco por la enzenhanza. Luego le pregunto si en mis viajes a la realidad-no-ordinaria debería continuar mi ascenso o si es tiempo de explorar el mundo de abajo. Mi maestro mira hacia mi izquerda, y con la misma intencidad de la bocanada con la que me absorvio, emite un soplido de nubes sobre un paisaje de apariencia selvatico (pero esta vez con marcado penhascos como en las selvas del sudeste asiatico). Yo me muevo ahora dentro de la soplanada y siento la humedad y el ruido de la lluvia todo a mi alrededor. COn la misma velocidad, ahora amainando, de la soblanada llego hasta las patas tracerasd e un cienpies de caparazon verde. El cienpies sin detener su marcha me guia (ya que etsoy como montado a él) sobre el tronco en descomposicion de un arbol caido. Zigsageando sobre la corteza del tronco y sobre su expuesto interior arribavamos a un hormiguero opor el que descendemos. Siento que el cienpies parece arriesgarse por mi, ya que algunas hormigas intentan trepar a él. Yo no siento ningun tido de temor m por las hormigas. Tomamos uno o dos pequenhos tuneles dentro del hormiguero para escuchar entonces el cambiar en el patron de los tambores. El llamado final comienza, siento que el torbellino me toma por mi espalda para sacarme de los tuneles. Enconces, sin ánimo de abandonar al cienpies a la merced de las hormigas, lo tomo por el lomo, justo sobre sus patas. Sin esfuerzos puedo sacarlo del hormigero y soltarlo sobre el tronco en decomposicion. Luego el torbellino se apropia de mí llevandome de regreso sobre el tronco y los penhascos selvaticos hasta mi maestro. Le agradezco a él y las pequenhas sombras antes de que el trobellino me arroje, aún de espaldas por el tunel-tiempo. Paso por el disco luminoso, el relor de arena, el verdugo (agradezco), la malefica y el dragon de humoi (agradezco), y siento la precencia humo-arena. Accedo al agujero en la membrana agredeciando por mi visita y caigo de espaldas hacia el mundo ordinario observando mascaras blancas volotear del otro lado de la membrana.

Me volteo intentando localizar mi punto de arribo. Veo las montanhas, siento el aire. El boulder esta cada vez mas cerca hasta que en el momento mismo de impactar me encuentro acostado vboca arriba sobre el boulder. Siento la fuerza de la montanha debajo de mi, y el polvo sobre las rocas en las palmas y la punta de mis manos. Un regreso vertiginoso..